fbpx

La tecnología como una postura ética

La tecnología como una postura ética ¿Cómo vivir en un mundo cada vez más tecnológico? Una reflexión acerca del libro “The question concerning technology” de Martin Heidegger (1954).

Investigación y creación por: Rodrigo García Acuña

Revisión y edición por: Jorge Luis Macías Lloret

Cuando pensamos en tecnología, solemos pensar en instrumentos: un medio para alcanzar cierto fin. Un tenedor nos ayuda a comer, un celular nos ayuda a comunicarnos, etc. Esta manera de ver la tecnología es correcta, nos dice Martin Heidegger, pero no nos dice toda la verdad. Si pensamos que la tecnología es un grupo de instrumentos que facilitan un fin, nos perderemos en una parte de lo que es la tecnología. No podremos llegar a su esencia, la verdad acerca de la tecnología. En su texto publicado en 1954, The question concerning technology, nos advierte Heidegger que debemos conocer la verdad acerca de la tecnología para saber cómo relacionarnos con ella: qué hacer y cómo vivir con ella. De fallar en tener esto en cuenta, nos dice de manera ominosa, corremos el riesgo de caer en el peligro extremo.

¿Qué es en realidad la tecnología?

La tecnología va más allá de los meros instrumentos. Si consideramos que un instrumento es aquello que nos permite alcanzar un fin, causar un efecto, podemos pensar que en un sentido más amplio la tecnología se refiere más bien al acto de realizar una meta. Esta idea puede sonar menos extraña si se considera que la raíz etimológica de la palabra tecnología, techné. La misma que en la palabra técnica, cuyo uso común se acerca mucho más al sentido propuesto anteriormente. Lo más llamativo, sin embargo, son otras dos reflexiones con las que Heidegger le da interesantes matices a esta idea.

Primero, pone énfasis en el carácter objetal y transformativo de la tecnología: todo acto tecnológico tiene como resultado un objeto nuevo. La presencia de este objeto en el pensamiento de Heidegger introduce un nuevo ámbito al proceso tecnológico. Este consiste en la relación que tenemos con ese objeto. Por ahora hay que dejar esta reflexión para no adelantarnos a las conclusiones del texto.

La otra reflexión que hace el autor alemán con respecto a lo tecnológico es sobre el proceso de la realización de ese objeto nuevo. Según él, el acto creador en este proceso no es una intervención física sobre la materia prima. Es decir, la parte importante para crear, por ejemplo, un juguete de madera o un teléfono celular no es el tallado de la madera o el ensamblaje en la fábrica, como se podría pensar.

La parte creativa de la tecnología

La parte verdaderamente creativa consiste en que una persona visualice el objeto que está por ser creado. Que reúna todas las cosas a las que el objeto deberá su existencia. Para ejemplificar esta idea de Heidegger, e intentar emular algo del estilo poético con el que escribe su texto. Hablemos de la creación de una cuchara de madera. Esta cuchara, que está a punto de llegar al mundo, le debe su existencia a cuatro cosas.

Primero, tiene una deuda con la madera de la que será fabricada, el objeto de base que tiene el potencial de convertirse en cuchara. También necesita tener una forma para convertirse en realidad. Por lo que dice Heidegger que la cuchara le debe su presencia a la forma propia de las cucharas. Un objeto así, hecho con esa madera y con la forma que tienen las cucharas, no se puede considerar una cuchara si no se usa como tal. Este punto es algo abstracto, pero nos dice que los objetos también necesitan una identidad. Necesitan pertenecer a un campo (en el caso de esta cuchara, pertenece a la cocina y la comida. Incluso podría decirse que es su hábitat). Así, diría Heidegger, la cuchara también le debe su existencia a las costumbres y los rituales alrededor de la comida.

Cabe resaltar que esta identidad no se considera como una predestinación eterna del objeto. La cuchara que está por aparecer no necesariamente pertenecerá a una cocina ni se usará para comer por siempre. Tal vez eventualmente sea utilizada con fines distintos o se utilice para la creación de algo nuevo.

La identidad del objeto tecnológico

La identidad con la que se crea un objeto es más bien un punto de partida para que aparezca en el mundo. Ya que llegue al mundo estará libre de cambiar y ser usado de distintas maneras. Por último, nos dice que la cosa con mayor responsabilidad por la presencia de la cuchara es la persona que prevé la cuchara antes de que exista y reúne los demás componentes. La madera con el potencial de ser cuchara, la forma que llegará a tomar y los usos y espacios que le darán sentido e identidad, al menos en un principio, a la cuchara. Así, la acción de crear algo, realizar una meta, se basa en un hacer-aparecer que trae al mundo un objeto nuevo. La esencia de la tecnología, por lo tanto, es crear y hacer presente un objeto que es, por ahora, solo potencial.

Tecnología antes y ahora

Ahora, cabe preguntarse si esta concepción de la tecnología en realidad coincide con nuestra visión de la tecnología actual. El mismo Heidegger señala que este tipo de creación parece alinearse más bien con el trabajo artesanal. Desentona con la manufacturación del nuevo mundo industrial. ¿En realidad podemos creer que un producto comercial actual, producido en línea de ensamblaje, en masa y con fines económicos en mente, atraviesa el proceso recién descrito? La respuesta es no, pero tal vez no por la razón que se esperaría.

El primer proceso tecnológico

Heidegger encuentra aquí dos variantes del proceso tecnológico. El primer proceso es tal como el descrito con la cuchara de madera anteriormente y parece encajar mejor con el mundo pre-industrial.

Segundo proceso tecnológico

El segundo proceso, característico del mundo industrial, también es una revelación. Es una transformación que sirve para traer un objeto nuevo al mundo, pero que se diferencia en cuanto a la relación que mantiene con el objeto revelado. Aquí entra la cuestión a la que se aludió previamente.

Reserva-a-la-espera

El segundo proceso transforma al objeto no solo en cuanto que crea algo nuevo a partir de él, sino en cuanto que lo convierte en una reserva-a-la-espera. En resumen, los objetos así revelados solo son valiosos en cuanto poseen cierta característica o función. Esta función puede ser amasada y utilizada después para producir algo más. Por ejemplo, árboles que solían conformar un bosque son derribados y transformados en papel para luego ser almacenados como reservas de papel, a la espera de ser necesitados y utilizados. El resto de las cualidades del árbol como objeto y el rol que ocupa en la interrelación de seres vivos dentro del espacio que habitaba son desestimados en cuanto que no atañen a la demanda que se le hace a la naturaleza. Proveernos de una reserva inagotable de la materia prima, en este caso papel.

Este proceso tecnológico desprovee a los objetos que crea de toda característica o función que no sea la de ser acumulados y almacenados. Esto, hasta que se les necesite para producir otra cosa después. No sé si haya un último eslabón en esta cadena de producción. Se podría considerar que radica en la venta a manera de producir dinero, o su utilización por el cliente a manera de mantener y reproducir un estilo de vida en el que la misma persona es utilizada para producir. En contraste, el primer proceso tecnológico no busca almacenar los objetos que crea ni desestima sus cualidades individuales. Es descrito en el texto como un proceso de simbiosis entre la persona que crea, el objeto que sirve de base para la creación y el objeto que llegará al mundo.

Heidegger le da un matiz increíblemente importante. Dice que un granjero que produce comida cuida a la tierra donde planta sus cosechas, atiende a sus necesidades y se aprovecha de los procesos inherentes a la naturaleza para producir, traer al mundo su cosecha. Por otro lado, el mismo pedazo de tierra, bajo el segundo proceso tecnológico, es visto como una reserva de minerales que espera a ser recolectada y procesada.

Lo tecnológico como postura ética

Aquí es donde acierta en el punto clave del texto. La verdadera diferencia entre ambos procesos tecnológicos es la manera de relacionarse con el mundo en el que estamos. Si un pedazo de tierra puede ser tanto el espacio donde habitan y se relacionan un granjero, la tierra y sus cosechas, como una reserva natural de carbón, es porque el proceso tecnológico es en realidad una cuestión de percepción, una actitud que ya tenemos con respecto al mundo que nos rodea, y, siguiendo esta última línea, también de ética.

Se trata de considerar qué responsabilidad tenemos hacia los objetos y seres vivos que están actualmente presentes. Determinar de qué manera es mejor convivir con ellos. De esta manera, se puede ver que el texto no solo consiste en una lección ambientalista para cuidar al medio ambiente. Nos muestra cómo nuestra percepción de un objeto, presente en el mundo que habitamos, está íntimamente ligado con la ética, las acciones y actitudes que tomamos hacia el objeto en cuestión. Y así también el resto de nuestro mundo.

Cabe recordar que las personas también son resultados de procesos tecnológicos. Según Heidegger, son ordenados, afectados, por el segundo proceso tecnológico primordialmente, antes que la naturaleza misma. De fracasar en reconocer la esencia de la tecnología y los modos en que ocurre la revelación de algo por-existir, corremos el riesgo de caer en lo que Heidegger llama el peligro extremo.

Caer en el peligro extremo

El peligro consiste en caer demasiado profundo en el segundo proceso tecnológico. Al despojar a los objetos y al mundo de toda característica que no sea aquella que se busca controlar, recursos para amasar, la persona se hunde en su propia humanidad y en una relación de control.

Todo el mundo, entonces, parece estar a-la-espera de su intervención, irrelevante hasta que entre la persona en escena. Quien se encuentre perdido de esta manera está condenado a voltear al mundo a su alrededor y no encontrar más que a sí mismo/a: todo objeto pierde su independencia de la humanidad y ahora queda reducido a aquello que es útil, se convierte en un reflejo de las necesidades humanas y nuestros procesos de producción. La persona, por su parte, queda desprovista de lo ajeno, inmersa en su mundo de producción y reproducción sin la posibilidad de encontrar algo que sea diferente, un cambio que muestre que las cosas no tienen por qué ser así.

Conclusión

Es muy recomendable leer esta obra de Heidegger. Por una parte, su estilo poético de escritura le da un toque místico a todo el texto. Suena que escuchas a alguien sabio contarte un acertijo, por lo que, aunque no lo entiendas completamente, suena importante e incluso bonito. Pero lo más importante del texto es cómo nos hace replantearnos nuestra manera de percibir y acercarnos al mundo.

Es fácil ver en las cosas del mundo tan solo aquello que nos es útil o disfrutable, pero hacerlo nos pone en peligro de perdernos en nuestra propia mente y perdernos de la verdad, lo que en realidad existe. Heidegger no aboga abiertamente por un regreso al mundo pre-industrial, él se preocupa más por la posibilidad para alcanzar la esencia de la tecnología y, mediante esta, de la verdad a través del cuestionamiento. Pero, en un sentido más estético y ético, me parece importante rescatar la relación del primer proceso tecnológico, construida en una relación simbiótica pero, principalmente, en una actitud de cuidar y atender al mundo que nos rodea.

Contenido

Cuando pensamos en tecnología, solemos pensar en instrumentos: un medio para alcanzar cierto fin. Un tenedor nos ayuda a comer, un celular nos ayuda a comunicarnos, etc. Esta manera de ver la tecnología es correcta, nos dice Martin Heidegger, pero no nos dice toda la verdad.

Tu Clínica en Línea

Te estamos esperando para escucharte y comprender la causa de tu ansiedad y depresión. Queremos ayudarte y sabemos que lo vamos a resolver juntos. No esperes más y refúgiate con nosotros. Agenda tu primer cita en línea.

Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia. Al continuar, aceptas nuestra Política de Privacidad y el uso de cookies.

Abrir chat
1
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?
Estoy de acuerdo con el aviso de privacidad y TyC.
;