Erich Fromm, nacido el 23 de marzo de 1900, tuvo un trasfondo familiar que incluía expectativas religiosas y musicales para su futuro. Sin embargo, en lugar de seguir los deseos de sus padres, se convirtió en un destacado psicoanalista en las décadas de 1950 y 1960. Este texto explora la influencia de sus raíces judías en su desarrollo personal y profesional, así como su evolución desde sus primeras investigaciones en la psicología social hasta su crítica a las teorías de Freud y su compromiso con temas sociales y políticos. El legado de Fromm sigue siendo objeto de debate y análisis en la psicología y la sociología contemporáneas.
Erich Fromm nació en marzo 23 de 1900, su padre Naphtali fue un pequeño comerciante de vinos, el cual quería que su hijo fuera un rabí; su madre tenía aspiraciones musicales y deseaba que su hijo fuera el siguiente Arthur Rubinstein, pero Fromm siguió su propio camino y se transformó en el psicoanalista mas popular y prolífico de los años 50´s y 60´s.
Resulta imposible entender la personalidad de Fromm sin apreciar sus raíces judías.
Nobel y Rabinkow dejaron una importante marca en Fromm, ellos combinaron los tradicionalismos religiosos con una profunda apertura hacia “el otro”
Fromm se interesó en la psicología social a raíz de la primera guerra mundial. Como un alemán preparado para la guerra, notó que muchos de sus amigos y maestros se involucraban en la permanente histeria de la guerra.
Cuando la guerra terminó, Alemania estaba en ruinas y Fromm a los 18 años estaba interesado en entender más de la naturaleza destructiva del hombre, la cual fue una preocupación que ocupó a Fromm por el resto de su vida.
A los 22 años Fromm recibió su doctorado en sociología en Heidelberg.
El tema de su tesis fue la función de la ley talmúdica en tres comunidades judías: los judíos ortodoxos, la reforma judía y las Daraites. A los 24 años, Fromm conoció a su primer analista, quien posteriormente fuera su primera esposa “Frida Reichmann” quien era una psiquiatra judía.
En un principio Fromm comulgaba con la teoría de Freud, pero posteriormente cambio de parecer.
Cuando Fromm, a finales de los años veinte comenzó a escribir, existían dos corrientes oposicionistas a las ideas de Freud: los marxistas y los no marxistas, entre estos últimos destacan: Sandor Ferenczi, Georg Groddeck, Karen Horney, Ludwig Binswanger, y Paul Schilder entre otros; y entre los Marxistas encontramos a: Wilhelm Reich y sus seguidores, a Otto Fenichel, Bruno Bettelheim y Paul Gero.
A pesar de que Fromm (quien era el único psicoanalista lego) fue seguidor de Reich por un año; posteriormente, ellos tuvieron algunas diferencias, entre las cuales destacan que Reich se alió al partido comunista, el cual era visto por Fromm con una profunda suspicacia; otra fue que Reich mantuvo su agrado por la teoría de la libido de Freud (en forma modificada) la cual Fromm abandonó.
Erich Fromm llega a estados unidos en 1933, poco tiempo después, Fromm se volvió un miembro y amigo regular de Harry Stack Sullivan en el Zodiac club, donde se encontraban Sullivan, Karen Horney, Clara Thompson, Ruth Benedict, Ralph Linton, Margaret Mead, y Abram Kardiner entre otros. Cuando Fromm hizo pública su concepción sociológica fue atacada por Fenichel en sus revisionistas puntos de vista de la teoría psicoanalítica.
Posteriormente tuvo ataques por parte de Adorno y de otros alumnos de la escuela de Frankfurt.
Después de que se retiró de la Asociación psicoanalítica internacional, Fromm fue director clínico del instituto William Alanson White de Nueva York.
En el verano de 1949 Fromm y su segunda esposa Henny Gurland vinieron a México con el objetivo de atender la artritis reumatoide de ella; al no lograrlo, ella murió en 1952, Fromm estaba devastado por la muerte de Henny; pero cuando recibió la invitación de Psiquiatras Mexicanos para dar una materia sobre psicoanálisis, decidió quedarse y fundó el Instituto Mexicano de Psicoanálisis, el cual dirigió hasta 1967, fecha en que sufrió un ataque al corazón y se mudó a Locarno Suiza.
En 1953, Fromm se casó con su tercera esposa Annis Freeman con quien vivió en Cuernavaca, donde recibieron la visita de D. T. Suzuki, quien guió a Fromm en el Budismo y la Meditación.
Fromm y sus alumnos realizaron un estudio en una villa pacifica llamada “Chiconcuac”, donde recopilaron información acerca de la historia y la antropología de 162 campesinos e hicieron estudios psicológicos, observaciones y entrevistas cara a cara y publicaron dicho estudio con el nombre de: “sociopsicoanálisis del campesino mexicano”.
En el tiempo que estuvo Fromm en México, el continuaba enseñando en estados unidos (durante 3 meses al año), esta fue la época en la que tuvo gran fama y popularidad, así como la época en la que lucho por el desarme nuclear, los derechos civiles y el movimiento en contra de la guerra de Vietnam.
En 1976 publico su libro “¿tener o ser?”, el cual fue un importante esfuerzo por sintetizar el psicoanálisis y la tradición espiritual, donde hace una crítica social y humana.
Fromm también criticó la metapsicología y la teoría de las pulsiones de Freud, así como su incorregible sexismo y su tendencia autoritaria de transformar al psicoanálisis en preceptos dogmáticos.
En “la sociedad sana” Fromm señalo los errores de Marx, así como también, destacó su personalidad y su estilo de liderazgo provenientes del leninismo y del estalinismo
Diversos autores han demostrado la aplicabilidad y utilidad de sus ideas en un extenso rango de síndromes clínicos y otros problemas; generando diálogos y debates en relación a la contribución de Fromm.
Fromm fue un erudito de la sociología y la filosofía; y vivió y trabajo en nombre de la vida humana.
Erich Fromm, un destacado psicoanalista del siglo XX, desafió las expectativas de su familia para convertirse en una figura influyente en la psicología y la sociología. Su interés en la psicología social se despertó durante la Primera Guerra Mundial, lo que lo llevó a cuestionar la naturaleza destructiva del ser humano. A lo largo de su vida, Fromm evolucionó desde su adhesión inicial a la teoría de Freud hasta su crítica a la metapsicología freudiana y su compromiso activo con cuestiones sociales y políticas. Su legado sigue siendo objeto de debate y análisis en diversos campos académicos.